martes, 23 de diciembre de 2008

La navidad de la pelotudez




Llegó la navidad, llegaron los regalos, llegó el viejito pascuero y el nacimiento del "niño Jesús". Todo el combo navideño llegó de una, y la verdad es que aunque pensé estar preparado para afrontar la fecha como corresponde, me sorprendió igual. Y ¿qué me sorprendió? la pelotudez intrínseca de esta fecha. A continuación, mi resumen con lo más estúpido de la navidad.



  • Blanca Navidad: Entiendo que el viejo pascuero venga del polo norte. Ok, vieja historia. El colmo de todo es que, estando en el mall, vi el summum de toda la pelotudez: nieve artificial. Sí, así como leen. En el mall hay una máquina que hace nieve artificial que cae desde la máquina sobre el árbol. ¿Alguien le dijo a los señores creativos que acá en Chile no neva en Diciembre? es más, ¿Alguien le dijo a todos esos creativos que en Chile nunca neva en ninguna época del año? Viejo, me encantaría que el viejo pascuero llevara short y polera manga corta y se cortara esa estúpida barba. Cuando estás en la calle y el calor del pavimento es igual al calor que hace en un baño turco, ¿quién puede entender que adentro del mall haya nieve?

  • Las compras de última hora: Quise comprar un regalo de amigo secreto y, a pesar que la hice súper corta y sabía lo que tenía que comprar, estuve hora y media tratando de salir de la tienda. Primero, fila para que me atendieran. Segundo, fila para hacer empaque (por alguna razón misteriosa la misma vendedora no tenía papel de regalo para entregarme y me derivó a otro departamento) y tercero hacer la fila para salir de la tienda. ¿Quién entiende algo? Nada de previsión, guardemos la plata y hagámosla mierda justo un día antes de navidad.

  • La confusión de la "santísima trinidad": Aunque hiera a algún corazón religioso, muchos aún no cachan que en esta época no se celebra el nacimiento de Dios, sino de Cristo. Anda a explicarle a ellos qué es lo que es el espíritu santo. No lo reconocerían aunque les pegara en la nariz. Olvídense de comprender el significado de la navidad. Oye, pero espera, ¿Jesús no nació un 25 de Diciembre? ups... acabo de sufrir un cortocircuito cerebral.

  • Los adornos navideños: Uno entiende que un ente con aires de inferioridad compre el tremendo árbol en su casa y lo decore con los más increíbles adornos de navidad, pero, ¿Quién entiende esos monstruosos arreglos de la fachada de las casas? He visto cosas horribles. No de feas, sino de consumo. ¿No que había que racionar el consumo de luz? Viejo, he visto adornos de casas que necesitan casi un generador aparte para funcionar. ¿Qué no pueden celebrar esta fecha con más austeridad? No, no pueden. Acá la idea es demostrarle al vecino que tienen la casa más pulenta. Y la casa más pulenta es la que consume todo la corriente que necesita una fábrica para funcionar un mes.


No perdamos el sentido de la navidad. Si usted la quiere celebrar, bien, celébrela. Pero siempre recuerde que su libertad empieza donde termina la mía. Y yo no tengo que soportar las filas de gente sudando para comprar, ni los pelotudos que celebran algo que no pueden ni deletrear, ni los adornos que hacen que las casas parezcan moteles o burdeles. O sea, un poco de respeto. ¿Por favor?

2 comentarios:

Anacoreta.- dijo...

Creí que me encontraría con algo mucho más ácido, pero debo reconocer que me pillé diciendo "I Agree"! en la mayoría d elos puntos, al menos...

Besos, abrazos y una feliz navidad de la pelotudez!! ja

P.-

Polo dijo...

Felipe, veo que te molesta tanto el sentido consumista de la Navidad como a mí, pero sin embargo fuiste parte de ese consumo cuando entraste al mall nevado e hiciste la fila para pagar el regalo y envolverlo, está bien que reclames, pero sé un poco más consecuente.

Cierto, Jesús no nació el 25 de Diciembre, pero precisar la fecha exacta es muy difícil, es por eso que se puso ese día, porque además se celebraba en otras culturas el día del dios Sol y como Cristo es la Luz entonces se empezó a reemplazar la fiesta.
Ah, también es cierto que se celebraba el nacimiento de Jesús y no de Dios, pues Dios existe desde siempre. Pero no hay que negar que Jesús es Dios, es el misterio de la Santísima Trinidad.